Pues ni quien se lo imagine, pero esta regata del río Nazas, por su extensión es única en México, tiene 42 años de estarse llevando a cabo. La organiza y muy bien, sin ningún apoyo de Turismo, la Asociación de Canotaje del Estado de Durango con base en La Laguna dirigida por su presidente el Sr. Eliazar Landeros Villa.
Este año finalmente, después de varios de querer participar en esta aventura, por fin, se nos hizo realidad, y un jueves por la tarde salimos un grupo de amigos organizados por Alberto Villanueva y con apoyo del Ing. Agni Otto García G., director del INMUDE, hacia Rodeo donde se da el banderazo de salida. Llegamos ya de noche, a tiempo para el desfile, donde dimos varias vueltas al pueblo para después irnos a la ribera del río donde encontramos un ambiente familiar, de amigos, viejos conocidos, alegre, de fiesta, misma que no fue muy fácil de penetrar de momento, pero los “de Durango” después de un ratito, finalmente fuimos bien recibidos y atendidos excelentemente por nuestros anfitriones.
El ayuntamiento de Rodeo en un gesto participativo, organizó un convivio esa noche con una rica cena y bastante bebida, disfrutándola un largo rato como debe de ser, para luego dormirnos y estar listos el viernes temprano por la mañana para la salida. El primer recorrido, sería de Rodeo a Nazas unos 60 Km. y arreglamos con los organizadores que nos permitieran salir desde Rodeo, pues éramos principiantes los cuales salen un poco mas río abajo, y digo que nos permitieran, como la mosca al burro, pues su servidor aun cuando tengo años de querer remar en la regata, no podía, pues acababa de salir de una hepatitis y venía simplemente de chofer y a tomar las fotos del viaje.
La carrera, pues si que la es, la componían en su mayoría embarcaciones de la categoría de kayak olímpico o si hacemos la comparación algo así como bicicletas de carreras bien livianos y delgados diseñados para velocidad pura; por otro lado, los que traíamos nosotros eran kayaks para ríos de agua blanca o rápidos, bastante mas pesados, lentos y por lo mismo mas estables, como bicicletas de montaña o balonas, así que por un lado estaba la competencia de velocidad y por el nuestro, un paseo turístico por el río Nazas, bien suave.
La velocidad de la corriente en el río, era bastante rápida lo que facilitó algo las cosas a los que iban remando de “turistas”, pues podían descansar en ratos y seguir moviéndose hacia delante, y no se diga a los competidores de en serio, pues les daba una impetuosidad increíble. El río Nazas para los de la ciudad capital nosotros “los durangueños” no tiene mucho significado, de hecho casi ni nos acordamos de el, pero para los de su ribera como Rodeo, Nazas y la Laguna, (los Laguneros) es casi su razón de ser, pues de esa agua, que se origina en las cuencas del noroeste del estado de Durango, se riegan innumerables cultivos, recargan sus muy explotados mantos acuíferos y mantienen sus lecherías por lo que ahora la Comarca Lagunera es famosa, y conocida como la cuenca lechera mas importante del país, lo que nos hace pensar del papel elemental que juega la Sierra Madre Occidental del noroeste del estado, en la captación del liquido vital, el agua.
La segunda etapa es de Nazas a la presa Francisco Zarco donde la velocidad del río se pierde en el enorme embalse de la misma, teniendo que remar continuamente en un tramo de casi seis horas para nuestros “turistas” , y al igual que en Rodeo tanto la gente de Nazas como la de los de la presa nos trataron de maravilla.
La tercera y última etapa, sigue de este gran cuerpo de agua rumbo a Lerdo, donde en parte de su trayectoria, el río pasa por el Cañón de Fernández ahora una área natural protegida y el contraste de la ribera del río, con sus grandes sabinos verdes y lo seco del desierto chihuahuense que aquí se representa, es impresionante.
En la meta situada, en el parque popular Raymundo, el cual por cierto está bien organizado, muy limpio y sin vendedores ambulantes, se recibían a los competidores con fuertes aplausos y gritos eufóricos pues la gente les reconocía el esfuerzo que es participar en esta justa de tres días y casi 150km. Los “turistas” los “de Durango” desgraciadamente por las características de sus naves, llegaron a la meta unas tres horas después que el primer lugar de los verdaderos competidores y nada mas estaba un grupo pequeño de Laguneros, familiares y yo para recibirlos pero de todas maneras les aplaudimos y vitoreamos con entusiasmo, pues ahora si que aun, cuando los tiempos de remar en el sol del medio día eran maratónicos (seis horas), nadie de nuestros “turistas” se rajó y todos salieron avantes de su prueba.
De regreso manejando en silencio, me vine pensando, “a ver si el año que entra se me hace participar”.
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